El horror se apoderó de toda la comunidad de Villa Nueva Venezuela, al noreste de Ciudad Ojeda, ante el vil y atroz crimen que descubrieron apenas comenzaba el domingo de ayer.
A las 8:00 de la mañana vecinos y familiares de Arianny Beatriz Navas Rojas, de apenas 13 años de edad, descubrieron su cuerpo inerte, semidesnudo y con signos de violencia tendido en uno de los cuartos de vivienda que compartía con su progenitora.
12 horas antes, la noche del pasado sábado, su madre se despidió de la preadolescente y se enrumbó hasta las instalaciones del hospital “Pedro García Clara” en Ciudad Ojeda, para iniciar su guardia nocturna como vigilante del centro de asistencia de salud-
Sin más complicaciones que las emergencias provocadas por accidentes de motocicleta o ingesta alcohólica, la mujer cumplió su guardia y regresó a su residencia pasada las 7:00 de la mañana de ayer. Todo parecía normal en la calle San Antonio de Nueva Venezuela, donde se ubica la casa signada con el número 10 donde se encontraba la pequeña.
Lo que encontró en su casa no le dio ninguna buena espina: nadie respondó los golpes a la puerta, ni los mensajes ni llamas al celular que dejaba a su hija para mantenerse en comunicación permanente- El silencio ante la insistencia originó la angustia materna y a pedir colaboración a sus vecinos cercanos quienes derribaron la puerta frontal para ingresar al inmueble.
La escena conmovió y horrorizó a todo el pueblo: La niña yacía en la cama sin vida mientras que una almohada le tapaba la cara, como evidencia inminente de la causa de la muerte.
El caso posee tintes similares a los ocurridos en el asesinato de Mayerlis Lisseth Sierra, la jovencita de 14 años que el pasado martes 2 de agosto fue hallada muerta por su madre en el rancho donde vivían, en el sector Villa Margarita, en el municipio San Francisco.
Dos vecinos aprovecharon que Sierra se encontraba en la vivienda con su hermanito con discapacidad cognitiva mientras su mamá estaba en un centro de salud por dolencias físicas,
Los homicidas golpearon al niño y sometieron a Mayerlis hasta abusar sexualmente para luego estrangularla. Su cuerpo fue descubierto por su progenitora luego que regresara del hospital.
Ayer los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de Ciudad Ojeda, realizaban los primeros interrogatorios entre familiares y vecinos para dar con la identidad de los autores del atroz crimen.
Sospechan que se traten de conocidos de la joven o vecinos muy cercanos, quienes sabían de los movimientos laborales de la progenitora, lo que aprovecharon para ingresar a la vivienda. El cuerpo fue trasladado a la morgue del hospital de Cabimas para practicar la necropsia correspondiente que permita arrojar datos sobre el vil homicidio que mantiene en conmoción a todo el municipio Lagunillas.