El Presidente de Empresas Polar ha dicho que su compromiso con el país es “eterno”. No le temblará el pulso para continuar con las grandes inversiones. “En setenta años nos ha ido muy bien”, dijo.
Lorenzo Mendoza ha sellado alianza entre Empresas Polar y la gigante española Leche Pascual para lanzar al mercado un nuevo producto. “Migurt” es la más reciente marca del emporio venezolano de alimentos, un yogurt con el que asegura liderará el mercado de aquí a cinco años como máximo.
La nueva apuesta ha valido unos 150 millones de dólares con una planta de 50 mil metros cuadrados en el parque industrial de Valencia. Y ha dicho que el arranque del proyecto quiere sencillamente expresar su motivo: “Mi compromiso con Venezuela es eterno”.
Y vaya que este empresario tiene temple. Empresas Polar, el grupo de alimentos más grande de Venezuela, ha sido objetivo directo de ataques desde el Gobierno nacional. Amenazas manifiestas del mismo Presidente Hugo Chávez quien le ha dicho en cadena nacional, “Me han declarado la guerra económica” o “Mendoza, no tengo problema, te quito todita la Polar”. El fraseo del Jefe de Estado buscaba así responder a la defensa de la empresa contra las expropiaciones ordenadas desde Miraflores y decomisos de alimentos bajo el argumento del acaparamiento.
Pero Mendoza está convencido de seguir haciendo empresas en Venezuela, y nada parece desenfocarlo.
Le hemos preguntado, desde RevistaRepublica.com, si teme, y la tentativa de la interrogante parte sencillamente de las pulsiones políticas más inmediatas. El mandatario nacional ha sido ratificado por seis años más en el cargo, se llama a un debate constituyente y el Estado Comunal es ahora la máxima campaña del Gobierno para transformar el sistema político-económico del país.
“Cuando uno nace con una huella que es el emprendimiento, la inversión privada, la generación de bienestar por la vía de oportunidades, uno no cambia su rumbo. Miguel Cabrera es lo que es y Omar Vizquel es lo que es porque se dedicaron a jugar béisbol desde carajitos, y fueron los mejores jugando. Nosotros, lo que sabemos es hacer empresas, es asumir riesgos económicos, traer productos de calidad y hacer productos de calidad, para y con los venezolanos”.
Y agregó: “Si yo me pongo a pensar en otra cosa, como dicen, la marea me lleva. Yo la única forma que sé motivar y mantener a la gente trabajando es crear puestos, innovar con productos, una habilidad que gracias a Dios recibí y que también ha tenido mi familia y miles de hombres y mujeres que han pasado por Empresas Polar, y en setenta años nos ha ido muy bien”.
A Mendoza no le tiembla el pulso para seguir asumiendo riesgos, un carácter que terminó doblegándose en miles de empresarios. Según el bloque de Fedecámaras unas 170 mil empresas cerraron sus puertas en la última década.
“Yo no voy a cambiar nada, absolutamente nada que realmente ha sido bueno para Venezuela, bueno para Empresas Polar, bueno para el venezolano de ayer, de hoy y el del mañana. Vizquel acaba de retirarse sabiendo que, de alguna manera, fue el mejor shortstop de la historia, yo espero humildemente representar a Venezuela en un sitial semejante desde la perspectiva empresarial”, dijo.
Pero la confianza de Mendoza lleva a preguntarle si se tendieron los puentes con el Gobierno nacional, si existe una tregua. Él llama con una diplomacia sencilla al trabajo conjunto con el sector público, uno dominado por la administración que más ha puesto en riesgo la estabilidad de su propia empresa.
Inversiones mil millonarias y además con capitales conjuntos desde España, dejan en la mesa la hipótesis. ¿Hay banderas blancas?
“Yo puedo decir con tranquilidad que estamos convencidos de la necesidad que el sector público y privado tienen de trabajar unidos. El sector público generando las condiciones y la empresa privada haciendo lo que le corresponde. Siempre que hemos sido convocados a cualquier reunión, a cualquier hora, en cualquier parte, para ponernos de acuerdo en cómo realzar a Venezuela, hemos dicho presente, pero si nadie nos llama, nosotros seguimos invirtiendo, creando oportunidades, es nuestra filosofía”.
Carlos Moreno/RevistaRepublica