Moscú – 17 de diciembre de 2025
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha reafirmado con contundencia la determinación de su país para alcanzar todos sus objetivos en Ucrania, en un discurso dirigido a la cúpula del Ministerio de Defensa en Moscú. La declaración, emitida en medio de una intensa actividad diplomática global para buscar una salida al conflicto, subraya la posición inalterable del Kremlin respecto a la llamada «operación militar especial», iniciada en febrero de 2022.
«Los objetivos de la operación militar especial se lograrán, sin ninguna duda», sentenció Putin ante los altos funcionarios. Entre estos objetivos, el líder ruso volvió a incluir explícitamente el control de lo que denominó «territorios históricos rusos», una referencia directa a las regiones ucranianas anexionadas que Rusia reclama como propias.
Putin manifestó la preferencia de Moscú por una resolución pacífica, aunque sin ceder en sus demandas fundamentales. «Preferiríamos conseguirlo y eliminar las causas profundas del conflicto por medio de la diplomacia», aseguró. Sin embargo, lanzó una advertencia clara a Kiev y a sus aliados occidentales: «Si el país rival y sus patrocinadores extranjeros se niegan a hablar de manera sustancial, lo haremos por la vía militar». Este enfoque dual, que combina una aparente apertura a las conversaciones con una férrea voluntad de continuar la ofensiva, define la postura actual de Rusia.
La dimensión diplomática y las relaciones con occidente
La declaración de Putin coincidió con nuevos movimientos en el tablero diplomático internacional. El líder ruso dedicó un comentario específico a las relaciones con Washington. «Saludamos el progreso realizado en el diálogo con la nueva administración estadounidense», afirmó, sugiriendo una posible ventana de entendimiento con el gobierno del presidente Donald Trump. No obstante, contrastó este optimismo con una crítica directa a Europa: «lo que, lamentablemente, no se puede decir sobre los actuales dirigentes de la mayoría de países europeos», sentenciando un claro deterioro en las relaciones bilaterales con la Unión Europea.
Avances en garantías de seguridad para Ucrania
La mención de Putin a Estados Unidos cobra especial relevancia tras las recientes conversaciones entre enviados de Washington y funcionarios ucranianos. El pasado lunes, Ucrania celebró los «avances» logrados en Berlín respecto a la cuestión de las futuras garantías de seguridad que el país solicita para su defensa posconflicto.
A pesar de estos avances, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, señaló que persisten diferencias significativas. La principal de ellas radica en los territorios que Ucrania estaría dispuesta a ceder a Rusia como parte de un eventual acuerdo de paz, un punto que sigue siendo el mayor obstáculo para cualquier negociación.
El Kremlin, por su parte, se mantiene a la expectativa de la información que pueda surgir de las conversaciones en Berlín. El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, declaró el miércoles que Moscú está esperando ser informado por Washington. «Esperamos que, tan pronto como estén listos, nuestros homólogos estadounidenses nos informen de los resultados de su trabajo con los ucranianos y los europeos», indicó Peskov, mostrando el interés de Rusia en la dirección que tomarán las negociaciones entre Ucrania y Estados Unidos.
El mensaje de Putin de hoy es inequívoco: mientras se abren y cierran las puertas de la diplomacia, Rusia no desviará el curso de su campaña militar hasta ver cumplidos los objetivos que se ha trazado en el territorio ucraniano.
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