La expectativa de una reunión entre los países Opep y No Opep, en la ciudad de Doha (Catar) y el próximo mes, fue el “oxígeno” que detuvo la caída estrepitosa de los precios del crudo. En el último mes, los marcadores internacionales WTI, Brent y Opep ya suman recuperaciones de hasta 13 dólares (+45%) y van en vías de escalar hasta la marca de los 50 dólares por barril.
El anuncio de un encuentro formal entre las principales potencias petroleras del mundo, para concretar un acuerdo de congelar la producción por un espacio de seis meses, le dio un “segundo aire” a la cotización del “oro negro”. La cita ya quedó establecida para el próximo 17 de abril en Doha (Qatar) y se espera la presencia —según comentó el ministro de Petróleo y Minería de Venezuela, Eulogio Del Pino— de al menos 20 naciones, cifra que podría ir aumentando con el paso de los días.
A la fecha, las cestas internacionales —Brent, WTI y Opep— ya borraron su peor “racha” registrada entre enero y febrero cuando marcaron cotizaciones similares a las de 2003. Luego de 90 días ya reportan significativas ganancias.
La cesta comercializada en Estados Unidos es la líder en repuntes. En febrero bajó hasta los 28,48 dólares y hoy se ubica en 41 dólares, es decir, que ha ganado 12,72 dólares (45%).
Asimismo, el Brent cerró esta semana sobre los 42 dólares y suma un alza del 37%. Mientras que el marcador Opep tampoco escapó del saldo positivo con un incremento del 40% (+10 dólares por barril).
En febrero pasado, el ministro Del Pino pronosticó que de confirmarse un “repliegue” de la producción de los países Opep y No Opep hasta julio próximo podría impulsar la tasa del petróleo hasta los 50 dólares, en el mejor de los casos.
“Lo que queremos es que la demanda drene el exceso de oferta y lleguemos a un punto de equilibrio para el segundo semestre del año. A mitad de año debe haber una recuperación de entre 10 y 15 dólares”, resaltó.
Asimismo, el ministro interino de Petróleo de Kuwait dijo, hace una semana, que espera que el crudo alcancen entre 40 y 60 dólares por barril en los próximos tres años. “Creo que veremos indicios de un incremento en la demanda para fines de este año y probablemente precios un poco más altos en 2017 y 2018”, explicó Anas al-Saleh a reporteros extranjeros.
Hasta ahora, la propuesta de Irán de desincorporarse del plan de “cerrar el grifo”, en el que se suman países como Arabia Saudita, Rusia, Venezuela, Noruega, Ecuador, no ha impedido que cada día aumente la expectativa de una recuperación de los precios.
Teherán sigue decidido a duplicar sus envíos de crudo hasta niveles previos a las sanciones internacionales antes de limitar su bombeo. Hoy, mantiene un bombeo de 3 millones de barriles/día y mantiene su meta de subirla hasta los 4 millones de barriles/día. Luego, el Gobierno anunció que sí se sumaría al plan de congelar la producción el tiempo que sea necesario.
El experto en el sector de energía y petróleo, Heliodoro Quintero, indicó —a este rotativo— que la Opep debe ser vigilante de que se cumpla (a lo interno del grupo) los acuerdos de producción para poner freno a la sobreoferta. Indicó que el ente mantiene un bombeo adicional de unos 2,6 millones de bpd.
“Sería muy útil que se restablecieron los niveles de producción ya acordados (30 millones bpd), que se efectuara un reunión del grupo antes del encuentro de abril en Qatar (…) eso ayudaría en la recuperación de los precios internacionales (del crudo). A estos precios ningún proyecto petrolero nuevo es rentable”, opinó.
Jesús Lobo, analista del sector, opinó que “lo más favorable es que se está saliendo de esos valores tan ínfimos y cercanos a los 25 dólares. Nadie quiere producir petróleo a pérdida y que sus presupuestos sigan sumando déficit”.
Pero no todo se percibe favorable en el escenario energético mundial. Recientemente, la consultora energética de Noruega, DNB Markets, puntualizó que la cotización del crudo podría bajar en 10 dólares por barril y borrar las alzas recientes si los países dentro y fuera de la Opep no logran acordar un plan para congelar los niveles de bombeo.
“Si pueden acordar un congelamiento en la producción, creo que hemos visto un piso. Si fracasan, creo que el petróleo caerá unos 10 dólares por barril nuevamente”, indicó el analista de DNB Markets, Torbjoern Kjus, durante una conferencia sobre energía en Oslo, Noruega.
A su vez, Roberto Linares, consultor financiero, añadió: “Parece que marzo significa un nuevo arranque para la recuperación del crudo internacional. El mercado está estabilizándose en precios óptimos tanto para países productores y consumidores”.
El petróleo ya acumula 20 meses continuos en descenso. Dicho período de tiempo —entre 2014-2016— es el ciclo más extenso de precios bajos del petróleo en las últimas cuadro décadas.
Vía www.diariorepublica.com