El Senado de Chile aprobó este miércoles el proyecto de ley para legalizar el matrimonio igualitario, una demanda histórica del movimiento LGTBI que aún debe sortear en las próximas semanas otra votación en la Cámara de Diputados del país andino para su entrada en vigor.
Por amplía mayoría, los senadores dieron luz verde a la iniciativa legislativa que permite la adopción y la filiación en parejas conformadas por el mismo sexo, a diferencia del Acuerdo de Unión Civil (AUC), la figura legal que está vigente desde el 2015.
«No es un tema de derechas o izquierdas, no es un caballito de batalla ideológico de nadie, tiene que ver con la dignidad y con los derechos humanos de los niños», relató Rolando Jiménez, activista del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).
«Queremos avanzar a un país que se juegue con otros valores, que avance en justicia y en erradicar toda forma de discriminación», afirmó la presidenta de la Cámara Alta, la senadora de la Democracia Cristiana y posible candidata presidencial, Yasna Provoste, quien votó a favor del proyecto. La votación se demoró por dos días tras debates entre legisladores a favor del proyecto y conservadores que alegaron que la institución del matrimonio no podría aplicarse en parejas del mismo sexo.
«Cuesta mucho que las instituciones cambien. De hecho, ha cambiado mucho más rápido la sociedad que la institucionalidad», indicó Alejandro Guillier, ex candidato presidencial de la Nueva Mayoría y senador del Partido Progresista (PRO).
En enero de 2020, el Senado chileno decidió aprobar la idea de legislar el proyecto, pero no avanzó en su articulación ante la férrea oposición de los partidos conservadores que integran la coalición oficialista. Dando un giro a su postura sobre el matrimonio igualitario, Piñera solicitó tratar el proyecto con «urgencia», un mecanismo que permite apurar su tramitación y al que se había negado en el año 2019.
Fuente EFE y DW/Diario República
www.diariorepublica.com