Un novedoso sistema de iluminación por leds ofrece desde este mes de junio una nueva percepción de uno de las grandes obras maestras de la pintura, la ‘Mona Lisa’ de Leonardo da Vinci, en el parisino Museo del Louvre.
Gracias a esta nueva luz, que sustituye al anterior sistema halógeno, los expertos aseguran que es posible percibir los colores originales de la ‘Gioconda’ tal y como los pintó Leonardo y al tratarse de una luz fría y no ofrecer calor también supone una forma de preservación del valioso lienzo, al que afectan los cambios de temperatura.
La artífice de la nueva iluminación es la multinacional Toshiba que ha realizado una serie de estudios cromáticos para compensar los colores gastados de la pintura y el tono verdoso del cristal que protege la obra. La nueva iluminación se adapta en cada momento a las condiciones ambientales de luz y corrige todas las imperfecciones con un sistema automatizado. De esta forma, el cuadro siempre tendrá el mismo aspecto para el visitante independientemente de la climatología, haga sol o esté nublado.
Vía ElPeriódico