Desde tempranas horas de este lunes los monaguenses permanecen en la avenida Juncal de Maturín, la capital, a la espera del candidato socialista, Nicolás Maduro, quien continuará su campaña, rumbo a las elecciones presidenciales de este domingo.
Una de las que acudió a primera hora a la avenida es Maritza Reyes, habitante de la parroquia Las Cocuizas, que junto a su esposo e hijos se concentró con mucha alegría en la avenida Orinoco, donde está previsto que Maduro llegue a las 10:00 de la mañana.
El aspirante socialista hará un recorrido por esta arteria vial y posteriormente se dirigirá a los presentes desde una tarima situada en lel sector El Banquiao de la Juncal, tal como lo hizo el comandante Hugo Chávez el 28 de septiembre, a propósito de las elecciones presidenciales de octubre pasado.
«Vine a apoyar a Maduro porque, además de ser el elegido del comandante (Hugo) Chávez, ha demostrado ser un hombre noble que vela por las clases más desprotegidas. Es un hombre que por casi 20 años estuvo al servicio fiel de nuestro líder revolucionario y sabemos que no nos defraudará», expresó.
José Guédez, quien reside en la parroquia Los Godos de Maturín, resaltó la necesidad de continuar el proceso revolucionario, por cuanto es «la única manera de garantizar la paz, la igualdad de género y profundizar el Plan de la Patria. Nuestra soberanía estará garantizada con Maduro, con la revolución, que ha dignificado a los hombres, mujeres, madres, hijos y abuelos de este país».
«Además de un profundo sentimiento que nos ha embargado la pérdida de nuestro presidente, los chavistas tenemos coraje y trazamos el compromiso de continuar la lucha por esta patria, por el amor, la unión y la inclusión», dijo María Rojas, habitante de la parroquia San Simón, quien se apostó en la Juncal antes de las 6:00 de la mañana.
Rojas reconoce el apoyo de la Revolución Bolivariana al pueblo venezolano. En su caso destaca haber sido favorecida con las misiones Madres del Barrio y Sucre, programas sociales creados por el presidente Hugo Chávez.
La Misión Madres del Barrio permite a la mujer de escasos recursos económicos, postulada por el consejo comunal de su zona, recibir una asignación económica mensual mientras alcanza la fase de producción en un área escogida previamente y comienza a percibir ingresos. Para ello recibe la debida capacitación y el financiamiento del Estado venezolano.
Entretanto, la Misión Sucre garantiza el acceso universitario a todos los bachilleres y transforma la condición de excluidos del subsistema de educación superior.
Vía AVN