El cuerpo de alias «El Benito», abatido la madrugada de ayer por una comisión del Cicpc Zulia, sería velado desde hoy en la Cárcel Nacional de Sabaneta, informaron fuentes de alto rango del centro de reclusión.
La información, sorprendente por demás, habla de las fuertes conexiones que tuvo el abatido con los máximos líderes del penal quienes habrían ordenado el traslado de sus restos y lograr establecer una especie de Capilla Ardiente en el patio del reclusorio.
Sería la primera vez que un acto de esta naturaleza ocurre en la cárcel…
Avance….
Los hechos y las informaciones tras la muerte de «El Benito»
Increíble la cifra de muertos que Benito de Jesús Semprún Peña tenía a su cargo. El desalmado hampón había arrancado la vida a 27 personas a punta de bala, sin contemplación. Y hoy murió por la misma ley, la del hierro, pero enfrentando a la justicia.
El Comisario Juan Pereira, jefe del Cicpc Zulia confirmó la espeluznante cantidad de asesinatos cometidos por este delincuente estrechamente vinculado a las mafias de la cárcel de Sabaneta.
En la madrugada de ayer pensó por un momento que tenía el poder de fuego y la astucia para escapar a un grupo de operaciones del Cicpc que lo seguían hace varios días. Lo sorprendieron muy cerca del Seguro Social de Sabaneta, y decidió batirse a balazos con la comisión. Hasta allí llegó.
Pereira confirmó numerosos tribunales lo tenían calificado como un sujeto de alta peligrosidad y lo requerían, pero hasta el sol de hoy nada se sabía del hombre que permaneció largo tiempo enconchado.
El Benito había operado con la banda de Rolando de Jesús Simancas, alias El Rolandito, y Robert Ferrer, llamado El Robert, habría estado inmerso junto con estos dos en el asesinato de los Polimaracaibo Andy Antonio Nava Rodríguez y Omar José Niño en Isla Dorada.
También aseguró el comisario que fue el responsable directo de la muerte del hijo del exrector del CNE Enrique Parra en julio pasado. El Benito habría sido el tirador de esa fatídica noche en el popular local Sarita donde encontró lamentablemente la muerte Carlos Parra.
Redacción/DiarioRepública