Sesenta y un días han transcurrido de la desaparición de Grecia Colmenares, ni las autoridades ni su madre han logrado descifrar el misterio que se esconde detrás de este caso.
“Detrás de todo esto hay un silencio que no entiendo y que está acabando con mi vida. No saber de Grecia me está enfermando. No como, ni duermo, pensando en mi hija”, expresó su madre, Aura Castillo, a dos meses de lo que asegura ser un rapto.
“No existe un mensaje, ni una llamada que me dé razón de mi hija. Solo gente burlona que no entiende el dolor de madre. Esto es para quien lo viva”, señaló la progenitora, quien dio su voto de confianza al nuevo jefe del Cicpc, Carlos Sifontes para que retome el caso en conjunto con el Gaes y sea resuelto con prontitud.
“Confío plenamente en el trabajo que están haciendo los organismos de seguridad para dar con el paradero de mi hija. Sé que manejan información importante para lograrlo”, sostuvo Castillo.
Hace un mes, aproximadamente, los funcionarios de la policía científica detuvieron a Ericson Hernández, quien reveló que Grecia Colmenares participó en el crimen del excicpc Naín Álvarez, perpetrado el pasado 17 de mayo, en el barrio Puerto Rico.
La información la dio a conocer el antiguo jefe del Cicpc, Heberto Alfonso Olano. Quien reveló que sobre Colmenares pesa una orden de aprehensión por su participación en el crimen. “Ella verificó que Álvarez estaba muerto”, sostuvo en ese entonces Olano.
Colmenares ha sido vinculada con mafias zulianas, hipótesis que es desmentida, categóricasmente, por su madre. “Es injusto todo esto. Mi hija no tiene relación con delincuentes”, precisó Castillo.
La joven, de 18 años, fue presuntamente “raptada por funcionarios del Cicpc”, según la versión que ofrece su progenitora, quien, además, había responsabilizado a este organismo policial de lo que le pase a su hija.
“Ellos tienen a mi hija y los responsabilizo por lo que pueda pasarle a ella y a mi familia”, dijo el pasado 7 de julio.
Sobre el caso, “no hay respuesta, ni pistas concretas”, indicó una fuente ligada a la investigación.
Castillo expresó: “Solo le pido a Dios que cuide de ella y me la devuelva sana y salva. Sueño con poder abrazarla y besarla. La necesito de vuelta en mi casa. Ella es mi alegría”.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com