En horas de la tarde de este martes 5 de enero, murió el menor de cuatro años que consumió junto a su hermano, una bebida alcohólica a base de frutas de Píritu, de una botella que consiguieron en una acera al frente de su casa durante la noche del 31 de diciembre.
El pequeño se encontraba recluido en el hospital Felipe Guevara Rojas de El Tigre, Anzoátegui, en el área de emergencia pediátrica desde el el 1 de enero tras ingerir la bebida, específicamente ron artesanal, según publicó el medio Fe y Alegría.
Previamente a este caso, su hermano, de nueve años murió en primera instancia cuando era trasladado por Yuribel Vielma de 24 años, madre de ambos menores, hacia el hospital de El Tigre en un autobús, desde la población de Boca del Pao, municipio Miranda, del estado citado, lugar donde acontecieron los hechos.
Se pudo conocer que el menor de cuatro años presentó complicaciones derivadas de la ingesta del licor lo que le causó un edema cerebral, neumonía por broncoespiracion y convulsión secundaria, efectos adversos que le ocasionaron la muerte en las instalaciones del nosocomio.
Este lamentable hecho ha consternado a la comunidad donde vivían los infantes, es decir, Boca del Pao y ahora, la joven madre de ambos niños carga con el dolor de la pérdida de sus hijos en un desafortunado hecho que es uno más de una larga lista de casos archivados en donde menores de edad pierden la vida por objeto de negligencia, falta de orientación educativa o fallas en el cuidado y atención a niños pequeños, así como también, irresponsabilidad de terceros en el consumo de licor en zonas urbanas.
Simón Sánchez
www.diariorepublica.com Vía Agencias/Diario República