Bandas criminales incendiaron cuatro autobuses y atacaron una estación de policía en la ciudad de Sao Luis, capital del estado de Maranhao, en el norte de Brasil, informaron autoridades locales.
Una niña de seis años que estaba dentro de un autobús sufrió quemaduras graves.
La orden de lanzarse a las calles, según las fuentes oficiales, provino de líderes de las bandas detenidos en la prisión de Pedrinhas.
Las autoridades creen que los ataques son en respuesta a denuncias de violencia en el interior de la cárcel.
En Pedrinhas murieron la mayoría de los 60 presos que perdieron la vida en prisiones del estado de Maranhao en 2013, lo que llevó a que se enviaran efectivos de la policía miliar a ese presidio.
El secretario de Seguridad de Maranhao, Aluísio Mendes, dijo que se se intensificó la presencia policial en las calles de la ciudad y que están investigando el incidente.
Brasil cuenta con la cuarta población presidiaria en el mundo, con más de medio millón de reclusos ocupando un espacio diseñado para unos 300.000.
Vía BBC