

El huracán Matthew se fortaleció este jueves y subió a categoría 4 en la escala de Saffir-Simpson, de 1 a 5, al acercarse a las costas del sureste de Estados Unidos, luego de haber dejado varios muertos e importantes daños en Haití.
El huracán, que pasa por el archipiélago de Bahamas, se encuentra a 290 kilómetros del sureste de Florida con vientos sostenidos de 220 km/h, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC). Los habitantes de la zona la estaban evacuando.
Matthew, la tormenta más poderosa que ha golpeado el Caribe en casi una década, avanzaba el jueves hacia el sureste de Estados Unidos, luego de dejar al menos 69 muertos, en su mayoría en Haití, en su camino hacia el norte. Mientras Matthew azotaba el noroeste de Bahamas, el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos predijo que su fuerza podría pasar de categoría 3 a 4 en la escala Saffir-Simpson en su curso hacia la costa atlántica de Florida.
La tormenta podría descargar directamente sobre el estado o avanzar a lo largo de la costa en la noche del jueves. Unas 65 personas perdieron la vida en Haití y miles más tuvieron que desplazarse después de que el huracán destrozó casas e inundó barrios a principios de semana.
El CNH amplió su área de alerta hasta el estado de Georgia, al norte de Florida, y más de 12 millones de residentes de Estados Unidos estaban bajo vigilancia por el huracán, de acuerdo a Weather Channel.
Las carreteras de Florida, Georgia y Carolina del Norte y del Sur estaban congestionadas y los suministros escaseaban en las estaciones de servicio y tiendas de alimentos antes de la llegada del huracán, que trae acompañado un fuerte aumento del nivel del mar, fuertes lluvias y vientos sostenidos que se aceleraron por la noche hasta unos 205 kilómetros por hora. Matthew se encontraba a 346 kilómetros al sureste de West Palm Beach alrededor de las 1200 GMT.
El daño podría ser «catastrófico» si Matthew impacta directamente en Florida, advirtió el gobernador Rick Scott, que instó a unas 1,5 millones de personas del estado a estar atentos a las órdenes de evacuación. «Si usted es reacio a evacuar, sólo piense en todas las personas que han perdido la vida», dijo Scott en una conferencia de prensa el jueves.
«El tiempo se acaba. Está claro que o tiene un impacto directo o va a subir por la costa y vamos a tener vientos con fuerza huracanada». «No hagan surf», señaló Scott. «No vayan a la playa. Eso les matará».
En Florida se esperaban una subida del nivel del mar de hasta 2,7 metros. Los cuatro estados en la trayectoria del huracán declararon el estado de emergencia, lo que permitirá a sus gobernadores movilizar a la Guardia Nacional.
Vía Panorama/www.diariorepublica.com



