
El destituido presidente de Paraguay Fernando Lugo descartó hoy que Venezuela se haya entrometido en los asuntos internos de su país cuando ocurrió la crisis que desembocó en el juicio político, el 22 de junio.
El ex obispo católico declaró durante seis horas ante una fiscal que investiga el caso y aseguró que no autorizó ninguna reunión del gabinete militar con el canciller venezolano Nicolás Maduro y ni siquiera sabía de ese encuentro.
Marcial Congo y Miguel Rojas, dos de sus colaboradores cercanos, también dieron testimonio y negaron haber escuchado una supuesta arenga de Maduro a los jefes militares para que desconocieran el juicio político y respaldaran a Lugo.
La declaración de Lugo cierra una etapa en la investigación, pero hoy, más temprano, la fiscal Stella Marys Cano anunció que citará seguramente a varios ex ministros del gabinete de Lugo, como Dionisio Borda (Hacienda), Víctor Ríos (Educación y Cultura), Augusto Dos Santos (Comunicaciones), Liz Cramer (Turismo), Esperanza Martínez (Salud) y los últimos dos ministros del Interior Carlos Filizzola y Rubén Candia Amarilla.
El presunto hecho fue denunciado por la ministra de Defensa, María Liz García, y generó un incidente diplomático que motivó el retiro de embajadores de Asunción y Caracas y el virtual rompimiento de relaciones entre los dos países.
dpa